Querida yo del pasado:
Cuando leas esto apenas habrás pasado unos años de un cuarto de vida porque espero que vivas (vivamos) cien años como esas señoras de Galicia que cuando les preguntan que hacen para conservarse tan bien contesten: un vaso de vino tinto diario. Porque tu eso de la copa de vino como los americanos al volver del trabajo lo tienes más instaurado que la costumbre. Y así va a seguir siendo. Y va a peor…
Pero el tema principal de este carta no es ese sino otro totalmente distinto.
Quiero desvelarte que todo lo que te fueron diciendo de pequeña y con el convencimiento que has crecido es mentira. Naciste en el seno de una familia tradicional y a largo de los años te has dado cuenta de que el amor es libre y no tiene edad, clase, religión, género. Que esa idea de que si no encuentras un hombre que te quiera a una determinada edad no vas a dar nada a la sociedad. Al contrario, siéntete libre de estar sola de conocerte y viajar contigo y de desarrollarte profesional y personalmente sin ataduras hasta que tú lo decidas. ¿Qué te apetece ser madre? Hay miles de formas en pareja o soltera porque ahora el concepto de familia es amplio. Y puedes ser mamá hasta con cincuenta años.
Así que tranquila que te (nos) queda mucho tiempo por delante.Y si no quieres, hay opciones para interrumpirlo por si no es el momento, no te sientes preparada o por desgracia has sufrido algún tipo de abuso ( por suerte tu hasta ahora te has librado y has esquivado a esa parte de los hombres que odian a las mujeres) pero por desgracia no todas son tan privilegiadas como tú. Hay una guerra entre los sexos. Hemos alcanzado mucho pero sigue habiendo trabas. Quién nos diría que hacer el amor sería algo tan complejo y la caballerosidad habría muerto y el enterrador sería la (no) educación. Ahora debe haber un papel de por medio. Que lástima que por el no respeto de la gente entre sí hayamos llegado a esto. Pero es que esos valores que eran generales en tu adolescencia parecen haberse desvanecido.
Hoy mismo he leído en un periódico digital que lo del tema de los ninis se puede considerar problema mental.
Por suerte seguimos cabiendo todos. Aunque el problema medioambiental cada vez va a peor. Aunque los millenials y la generación Z estamos más concienciados y estamos cambiando hábitos.
No esperes nada de los nuevos años 20. Si pensabas que estabas perdiendo el tiempo por descansar un fin de semana por estar agotada no te preocupes porque en 2020 será una sensación general. Hemos perdido y ganado a la vez un año.
Por desgracia lo malo sigue existiendo y hemos pasado por una época que bien podría haber dado para una trama de película de Apocalipsis zombie, el egoísmo sigue imperando. Siguen existiendo (aunque por suerte en minoría) neonazis, racistas, homófobos, misóginos, asesinos, violadores, maltratadores y en general mala gente con mucho tiempo libre que basa su vida y el tiempo que está sobre la tierra en hacer daño a los demás. Ahora es menos físico y más digital pero daña igual porque se expande más rápido. Si estoy a tiempo, no te hagas aquella foto con el móvil y no la envíes. Aunque ahora hay una aplicación que te protege y evita que puedan capturar, guardar y que desaparece del mundo virtual.
Cuando salgas de fiesta ten los ojos muy abiertos. Y mantén esa burbuja de cuidado con tus amigas esperando esa notificación de que han llegado a casa sanas y salvas.
Otra cosa de la que te vas a arrepentir es de desear crecer más rápido. Carpe diem, porque es cierto y ahora lo veo, que tienes todo el tiempo del mundo. Si aparece la oportunidad, cógela. Porque el tren sólo pasa una vez.
Finalmente decirte que si te planteas dudas en la dirección de tu camino profesional, no te obceques en una carrera porque consideres que es lo que te va a ayudar a conseguir trabajo. Elige con cabeza pero también con corazón porque trabajar en algo que odias es un lastre emocional. Y por desgracia ahora mismo da igual que escojas pues el sistema no se ha modificado y cada vez va a peor: sueldos bajos, alta inflación, y sobre todo tras la pandemia el encarecimiento general de la vida.
Pero tranquila, a pesar de todo has descubierto que la edad es solo un número y que nadie va a pararte aunque el transcurso de los acontecimientos no siga el plan trazado. Sé constante, no te detengas y sigue siendo buena persona que a pesar de los palos es lo que te llevas a la tumba.
Y al final tiene su recompensa.
Tuya siempre
Patricia P. Picatoste
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